Los productores ganaderos destacan la medida como una maniobra para dictar el precio de la arroba y los sindicatos se mantienen alerta ante posibles despidos.

Las organizaciones sindicales que representan a trabajadores y trabajadoras del sector muestran preocupación por el cierre que afecta plantas de la transnacional cárnica en tres estados: Mato Grosso, Paraná y Mato Grosso do Sul.

Los frigoríficos paralizados temporalmente no tienen habilitación para vender a China, el mercado más rentable.

Artur Bueno de Camargo, presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores de la Alimentación y Afines (CNTA), dijo que la estrategia de la compañía aún se desconoce pero que desde los sindicatos están atentos para reubicar a los trabajadores y trabajadoras que queden sin trabajo -aunque sea temporalmente- en otras unidades de JBS.

Por su parte las agremiaciones de productores ganaderos manifestaron su descontento y denunciaron que se trata de una estrategia de JBS para dictar el precio de la arroba bovina en el mercado y que están teniendo graves pérdidas con estos cierres.

La empresa brasileña obtuvo ganancias netas de 3.900 millones de reales (unos 766 millones de dólares) en el segundo trimestre de este año, según datos proporcionados por la propia JBS, cifras que superaron las estimaciones.