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Con Givanilson “Gil” Silva
La CONTAG, un soplo vivificante y esperanzador
Givanilson Silva, conocido popularmente como “Gil”, asesor de Arístides Santos, presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores de la Agricultura (CONTAG), nacido en Alagoas, radicado luego en Pernambuco, sociólogo de formación cuenta con una amplia trayectoria junto al movimiento sindical del campo, las aguas y la floresta. Atento, amable, conocedor en profundidad de la historia de nuestra afiliada, conversamos con él en la última visita a Brasilia en oportunidad de celebrarse la 6ta. Edición del Encuentro Nacional de Formación de CONTAG (ENAFOR).
Gerardo Iglesias
28 | 06 | 2022
Givanilson “Gil” Silva | Foto: Gerardo Iglesias
-¿Cómo definirías a la CONTAG?
-La CONTAG es sobre todo una organización de síntesis. Nació sintetizando el conjunto de las diversas luchas de los agricultores y agricultoras familiares por la organización sindical, los derechos laborales, por políticas públicas, por salud y por educación. La CONTAG es heredera de una trayectoria fundamental de organizaciones de base desde los años 30.
Justamente estoy realizando una investigación sobre el tema de los primeros sindicatos de trabajadores y trabajadoras rurales. Al contrario de lo que se creía hasta ahora, estos se remontan a 1937, en Pernambuco, Espirito Santo, Minas Gerais y tienen su origen en ligas campesinas, algunas vinculadas a la iglesia católica y otras al partido comunista, que ayudaron a construir tanto la ULTAB (Unión de Labradores y Trabajadores Agrícolas de Brasil), que fue la primera organización, como posteriormente la CONTAG.
Debido a ese origen, la CONTAG es una organización plural porque carga un conjunto de ideas que no son contradictorias entre sí pero representan la riqueza histórica y cultural de la agricultura familiar brasileña.
-Son muchos años de lucha, de una historia riquísima. Soy de los que opinan que no se puede hablar de la construcción de políticas públicas para el campo en Brasil sin hacer mención de la CONTAG…
-Exacto. Desde el Congreso Campesino de 1961, que reunió todo ese conjunto de luchas por la reforma agraria, hasta la formación de la CONTAG el 20 de diciembre de 1963, la historia del campo brasileño y de la mayoría de las políticas públicas para la agricultura familiar de este país tienen en su ADN la lucha y la firma de la CONTAG.
Como una de las organizaciones pioneras en esa construcción, hoy con 59 años, celebramos esa trayectoria de luchas, conquistas y contribuciones a la agricultura familiar de Brasil; de aportes a la construcción democrática del país, el establecimiento de la Constitución de 1988 que fue el resultado de un gran pacto social por la salud, la educación, la vivienda y los derechos fundamentales.
-¿Una lucha que excede la especificad rural yendo al encuentro de otros desafíos?
-También es correcto. La CONTAG no solo actúa para sus afiliados. Su lucha hace parte de un proyecto de nación, de construcción colectiva y plural. Es así que desde mediados de los años 90, la CONTAG construye junto a la CUT el proyecto alternativo de desarrollo rural sustentable solidario que da origen al PRONAF* consolidado en 1995.
-En la 6ta. edición de ENAFOR destaca la algarabía, la determinación de los jóvenes, el rescate de memoria histórica, la creación de espacios lúdicos propios de la educación popular. Un punto de encuentro donde convergen Paulo Freire, la hermana Dorothy Stang, Chico Mendes y Marielle Franco, entre tantos otros y tantas otras luchadoras. Se respira mística por doquier.
-Es cierto. Cabe destacar que este 6º ENAFOR fue elaborado a partir de 636 experiencias de organizaciones de base, de las diversas formas que tenemos de dialogar con agricultores y agricultoras familiares desde los lugares donde producen, donde trabajan, donde sueñan con un mundo mejor: en sus comunidades, asentamientos de reforma agraria, en las regiones extractivistas, en una comunidad quilombola o desde los pueblos originarios.
Tanto la escuela como el Encuentro Nacional de Formación de CONTAG tienen justamente eso del rescate de la mística del cuidado. Una pedagogía de la autonomía, como decía Paulo Freire: no solo pensar en la pedagogía del oprimido sino también celebrar la lucha, el trabajo y la organización con el protagonismo de jóvenes y mujeres.
Creo que ese es el diferencial de la CONTAG: la celebración, la vitalidad. Mantenemos viva la llama de la lucha colectiva, la mística de la esperanza y del esperanzar, como decía Freire.
Lo que celebramos en el ENAFOR es seguir siendo, a partir del proceso formativo, lo que en algún momento llegué a llamar soplo vivificante de las organizaciones sindicales, para que no se fosilicen en la burocracia de la estructura sindical.