Perú | 8M | CAMBIO CLIMÁTICO
Mujeres rurales, mujeres
con derechos
En este 8 de marzo, el Centro Flora Tristán se suma al llamado de Naciones Unidas a fortalecer iniciativas y acciones para lograr la igualdad de género ante la crisis climática, reconociendo la contribución de las mujeres a la sostenibilidad del planeta. A continuación, su pronunciamiento.
CMP Flora Tristán
24 | 10 | 2006
Foto: CMP Flora Tristán
El Centro Flora Tristán viene apostando por el empoderamiento de las mujeres rurales para incrementar su capacidad de respuesta ante los efectos del cambio climático, que agravan las desigualdades de género y las desventajas en que se encuentran por la desatención del Estado a sus problemas y demandas.
Las mujeres rurales, campesinas, productoras agroecológicas resisten y contribuyen en ese contexto de desigualdad al cuidado de la naturaleza en base a sus saberes ancestrales y trabajo comunitario. Están recuperando las fuentes de agua, las semillas nativas, la biodiversidad y promoviendo el desarrollo sostenible desde la agricultura familiar ecológica.
Pero los aportes no podrán escalar sin estas acciones decididas del Estado en favor de la igualdad de género en las zonas rurales. Este es un compromiso y una obligación urgentes para alcanzar un futuro sostenible.
El cambio climático es un desafío acuciante para la humanidad.
No solo amenaza los medios de vida de las poblaciones, sino que pone en riesgo el ejercicio de sus derechos, especialmente de quienes se encuentran en situación de mayor vulnerabilidad como son las mujeres por su posición diferenciada en la sociedad debido al actual modelo de desarrollo.
Las mujeres rurales dependen de la naturaleza y enfrentan permanentes y nuevos peligros. Requieren que el Estado, en sus diferentes niveles, apueste por cerrar brechas de género en el acceso a los recursos productivos, la capacitación técnica, el manejo de las TIC y la participación en los espacios de toma de decisión.
Prevenir, atender y sancionar la violencia de género es también urgente, junto con el impulso de emprendimientos agro productivos, de cara a fomentar su autonomía física y económica, necesario para el desarrollo de sus proyectos de vida en lo individual ya nivel colectivo y comunitario.
En ese proceso las mujeres rurales seguirán incrementando su voz y liderazgo para afirmar sus propuestas frente al cambio climático y los impactos de la pandemia.
Sus experiencias, necesidades y demandas son necesarias para una acción climática y un desarrollo post covid que las tome en cuenta y no las deje atrás frente al reto común de un futuro sostenible.
Foto: CMP Flora Tristán