José Javier Espinoza trabaja en Finca Álamo, una de las doce fincas que Chiquita Brands Costa Rica (Safra Group y Cutrale) tiene en Sarapiquí. Tiene 48 años, casi la mitad trabajando para la transnacional frutera.

Hace unos meses sufrió un accidente laboral y fue operado de la rodilla. Sigue necesitando de un bordón (bastón) para caminar, algo que no les importó a los administradores de la empresa, que lo obligaron a subir a una escalera para embolsar bananos.

La estrepitosa caída lo dejó inconsciente por un buen tiempo, durante el cual fue trasladado a una oficina, tirado en el piso y encerrado con llave. Sólo la pronta reacción de los dirigentes sindicales permitió que fuera atendido por el personal sanitario de la ambulancia y trasladado a una clínica.

En este video, Javier Espinoza narra el drama que vivió, el desencanto que le dejó el desinterés y el abandono mostrado por una empresa, que parece privilegiar la ganancia por sobre la vida de trabajadores y trabajadoras.
 

Video: Giorgio Trucchi