La diputada Ada de Luca (MDB), ideóloga del proyecto, recordó en una Audiencia Pública realizada el pasado lunes 9 en el Legislativo catarinense que, una de cada cuatro mujeres brasileñas no tiene acceso a absorbentes higiénicos y de ese alto porcentaje, al menos un 50 por ciento nunca habló del tema en la escuela.
El encuentro virtual, convocado por la diputada Luciane Carminatti (PT) contó con la participación de diversas especialistas, que abordaron desde una óptica multidisciplinaria la menstruación como un tema que debe ser tratado sin tabú, como un proceso natural del cuerpo femenino y debe formar parte de una agenda pública de salud para las mujeres.
Algunos de los relatos surgidos en la audiencia parecían extraídos de la Edad Media: mujeres que carecen, no solo de implementos específicos para su higiene personal durante el período menstrual, sino que siquiera cuentan con un baño.
Este aspecto sanitario incide directamente en la escolaridad de las niñas y jóvenes afectando su desarrollo futuro y ampliando la desigualdad de género.
La iniciativa de la legislatura catarinense apunta a universalizar el acceso a absorbentes higiénicos con la distribución gratuita a través de los puestos de salud y también de los centros escolares de educación pública, pero principalmente tiene el objetivo de que este tema sea tratado como una cuestión de salud pública.
Anne Teives, de la Defensoría Pública del Estado recordó que 1.500.000 brasileñas viven en residencias sin baño y que al menos 213.000 niñas y adolescentes no cuentan con baños en condiciones en sus centros escolares.
La Audiencia Pública señaló que entre la población más vulnerable están las mujeres privadas de libertad además de aquellas que viven en condiciones de extrema pobreza.
“En un contexto de crisis social y económica, agravado por la pandemia de Covid 19, muchas familias cuando tienen que elegir entre comprar un absorbente higiénico y comida, optan por la comida”, señaló Teives.
La Rel UITA participó como oyente de esa Audiencia Pública por entender que este es un problema que se extiende en América Latina y que la propuesta de Santa Catarina puede servir de ejemplo para otras regiones.
¡Enhorabuena si se aprueba!